Los adultos mayores que consumen mayores cantidades de alimentos ultraprocesados tienen aproximadamente un 10% más de probabilidades de morir que aquellos que comen menos alimentos procesados, durante un seguimiento promedio de 23 años. En particular, los refrescos y las carnes altamente procesadas, como los perros calientes, las salchichas y los embutidos, están “más fuertemente asociados con el riesgo de mortalidad”, señaló la investigadora Erikka Loftfield, investigadora del Instituto Nacional del Cáncer (NCI). “Comer una dieta baja en estos alimentos ya se recomienda para la prevención de enfermedades y la promoción de la salud”, añadió Loftfield en un comunicado de prensa del NCI. Los alimentos ultraprocesados están hechos principalmente de sustancias extraídas de alimentos integrales, como grasas saturadas, almidones y azúcares añadidos.



